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Con motivo del inicio de la legislatura, las ONG insisten en que estos cuatro años son "clave" porque tienen como escenario una "profunda crisis" financiera y económica que está entre otros motivos, agravada por el declive del actual modelo energético que, a su juicio, está provocado por haber rebasado el pico del petróleo, el impacto creciente del cambio climático, la pérdida acelerada de biodiversidad y un déficit ecológico cada vez más grave y evidente.


Por ello, plantean al próximo Ejecutivo que ponga en marcha 25 medidas encaminadas a los objetivos de descarbonizar la economía y proteger el clima; descontaminar, por la salud de las personas; proteger la biodiversidad; y a que la sostenibilidad vaya más allá de la protección del medio ambiente.


En este contexto, "más allá de las políticas" le recuerdan al nuevo Gobierno que tendrá que tomar decisiones sobre una serie de proyectos emblemáticos que se convertirán en indicadores de su voluntad política hacia la sostenibilidad. Entre ellos destacan el derribo del hotel El Algarrobico (Almería); el proyecto de refinería en Tierra de Barros (Badajoz); las obras del puerto de Granadilla (Tenerife); el dragado del Guadalquivir; la restauración de los terrenos contaminados por Fertiberia (Huelva); el embalse de Biscarrués (Huesca) y el polígono de Las Aletas (Cádiz).


Por ello, subrayan que la protección decidida del medio ambiente forma parte de la solución a la crisis múltiple actual que también es económica.


En su receta, la conservación de la biodiversidad permitirá mantener los servicios ambientales básicos y revitalizar los sectores primarios como la pesca o la agricultura, las energías renovables, el ahorro y la eficiencia energética, que permitirán reducir la dependencia energética del petróleo y del exterior.


Además, hace posible dejar de invertir en infraestructuras que califican de "ruinosas e infrautilizadas" y destinar más fondos públicos a educación, sanidad, a la protección de la naturaleza o la creación de empleos respetuosos con el medio ambiente.


Asimismo, abogan por una fiscalidad ambiental fuerte que aportará nuevos fondos y allanará el cambio hacia un modelo compatible con la capacidad real del planeta, así como por el cumplimiento de las leyes ambientales y la profundización en la democracia y la transparencia, que estiman que inyectará oxígeno en la vida pública y ayudará a recuperar la confianza de la ciudadanía en la clase política.(Leer articulo original)


En este contexto, las cinco organizaciones consideran "imprescindible" que exista un Ministerio de Medio Ambiente con un "fuerte peso" en el Gobierno, para emprender el camino hacia una sociedad baja en carbono y sostenible, como la "única salida viable a largo plazo y ambiental y socialmente justa".