La idea de Tomas( miembro del colectivo Mosaico), de recuperar una antigua tradición anterior a la época de las lavadoras automáticas, se llevó a su fin la semana pasada. Gracias al lavadero que conservan en la Finca de L´Avaiol, los miembros de la asociación que comparten el nombre de la finca.
De este modo y ataviadas con las ropas típicas de la época, las compañeras de Mosaico, se dedicaron a la tarea de lavar a mano, pasando una agradable y simpática tarde de verano.